Visita Fondo antiguo de la Universidad de Sevilla

La biblioteca universitaria de Sevilla posee una importante colección de fondos bibliográficos antiguos constituida por manuscritos y por volúmenes impresos del siglo XVI.

La procedencia de estos son de obras que pertenecieron al Colegio Mayor de Santa María de Jesús, origen de la Universidad y a su fundador Maese Rodrigo Fernández de Santaella, de las Bibliotecas de las Casas y Colegios de la Comparía de Jesús expropidas tras el Decreto de expulsión, así como las de los numerosos Conventos sevillanos despojados de ellas por la Desamortización.

Un interesante grupo de estas obras lo constituyen las procedentes de la primitiva Biblioteca Pública de Sevilla radicada en el agustino colegio San Acacio.

No menos importante para la formación de este fondo histórico fueron las donaciones de bibliotecas particulares que se incorporaron a la Universidad procedente del Cardenal Belluga, de Joaquín Hazaña o los Guichot, entre otros.

La casi totalidad de estos fondos están en la Biblioteca General (Fondo Antigüo). En ésta se encuentran los catálogos en fichas (manuscritos, incunables y obras de los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX), a excepción de los fondos de las Facultades de Filología y Geografía e Historía, cuyo catálogo, en lo que respecta a los siglos XV a XVII, está publicado.

La colección de manuscritos está formada por unos 800 volúmenes, en cambio, la de incunables la compone 298 títulos cuya joya bibliográfica es el Nuevo Testamento, la Biblia de las 42 líneas, salida de las prensas de Gutenberg hacia 1454-1456.

La modernización de las bibliotecas

Tras ver estos vídeos, tengo que decir que nunca he visitado ninguna biblioteca con estas características, las cuales serían el reclamo perfecto para el aumento de usuarios.

Estas bibliotecas cuentan con la última tecnología dónde se fomenta la interacción a través de múltiples herramientas con la que todos "juegan"y aprenden. Además, cuentan con mucho espacio para el ocio y disfrute de todos, alejándose de las bibliotecas convencionales, pero ahora bien, ¿dónde queda el papel, que hasta ahora, han desempeñado los bibliotecarios?

Como usuaria, creo que el contacto físico con un manual/libro es muy importante pero además no sólo eso, sino también el ambiente que hay en éstas ya que intentamos respetarnos manteniendo el lugar en silencio, hecho fundamental si intentamos estudiar, pudiéndo abstraernos de todo lo que nos rodea.

En definitiva, las bibliotecas del futuro seguirán el modelo de CRAIS igual que las que hemos visto en los vídeos, pero no sólo la nueva tecnología contribuirá a la creación de este prototipo sino también está influyendo el uso de Internet, esto es, Google está digitalizando libros de prestigiosas universidades. Este hecho tiene ventajas como por ejemplo no tener que desplazarse a las bibliotecas para consultar libros, pudiéndose hacer desde casa, y como desventajas, se suprimiría el personal bibliotecario, así como la desaparición del texto impreso.

Aquí dejo este vídeo que creo que puede ser interesante el cual trata sobre la labor de digitalización de libros que está llevando a cabo Google:

Visita a la biblioteca de la UPO

La visita a la biblioteca me ha parecido muy interesante ya que, a pesar de saber lo laborioso que es el trabajo de un bibliotecario y constatado éste en la visita, he conocido el programa de catalogación, diferente al de las bibliotecas públicas, las nuevas técnicas de control antihurto, el novedoso sistema de búsqueda y todo el procedimiento que se lleva a cabo desde la recepción de un manual, revista u otro tipo de material hasta que está disponible para los usuarios.

En cuanto al control antihurto, estabamos acostumbrados a ver unas etiquetas adhesivas pegadas dentro de las pastas de los libros, pero ahora, como todo evoluciona, se están utilizando otras que bien pueden pasar desapercibidas como parte integrante del libro. Si este hecho lo comparamos con mi experiencia en la biblioteca en la que realizé las prácticas, diría que aquí, en la UPO, se extreman las precauciones ante estos hechos delictivos. En cambio, en esta biblioteca pública no existen sistemas antihurtos y algo que resulta curioso es que apenas falta fondos (audiovisual, libros, revistas...) ya que estuvimos realizando un inventario y pudimos comprobar que faltaban muy pocos fondos.

El software de catalogación se realiza a través del programa Millennium, programa creado por una empresa norteamericana, en el cual encontramos muchas prestaciones para el registro de los fondos.

Por último, lo que más me ha llamado la atención, son los nuevos instrumentos para encontrar libros, "pistolas" que leen códigos de barras sin necesidad de ir uno por uno, facilitando la búsqueda y con éstas, no hay que ir mirando manuales o estanterías para averiguar si están extraviados.

Mi primer contacto con el mundo de las bibliotecas

Como primera entrada en mi blog, me gustaría comentaros mi visión equivocada sobre el mundo de las bibliotecas, errónea porque pensaba que no había trabajo en éstas o que no se precisaba de tanto esfuerzo, siempre había visto esta profesión desde fuera, como usuaria. Sin embargo, mi visión cambió cuando en el mes de enero, de este mismo año, comenzé las prácticas en empresas en la Biblioteca Pública de Montequinto.

El funcionamiento de ésta se rige por el programa de AbsysNet pero no sólo se depende de este software, que por cierto tiene muchas carencias, sino también del bibliotecari@ cuya labor es fundamental para el correcto desarrollo de una biblioteca.

Mi experiencia ha sido fenomenal tanto con el personal como con los usuarios ya que al ser una biblioteca tan pequeñita, todos nos conocíamos perfectamente y mi función dentro de ésta ha consistido básicamente en el trato con los usuarios y en el manejo del programa informático, así como la supervisión de la sala.

En definitiva, espero aplicar mis conocimientos adquiridos durante el transcurso de la práctica en esta asignatura puesto que me gustaría dedicarme a esta profesión.